Fuenlabrada es una de las ciudades pioneras en la integración social y la lucha contra la discriminación. El vídeo-cuento «Todo empezó sin querer» es una muestra de ello. Enmarcado dentro del programa Antirrumores puesto en marcha por la concejalía de servicios sociales, trata de enseñar a los más pequeños el valor de difundir valores positivos y no falsos rumores dañinos sobre miembros de la comunidad, aunque estos provengan de otras culturas, países y religiones.
El programa antirrumores funciona en Fuenlabrada desde el año 2013 y se completa con la actuación de una serie de agentes que difunden estos valores positivos entre su comunidad.