La película, dirigida por la hispanoitaliana Alessandra Zeka y la neoyorquina Holan Sabrina Kahn, cuenta el día a día de la doctora sandinista Carla Cerrato en medio del giro que ha dado Nicaragua hacia la prohibición del aborto terapéutico. El filme ha sido muy bien acogido en el Festival Human Rights Watch, en Nueva York.
Conocida ya como la “Vera Drake nicaragüense”, Carla Cerrato es la protagonista de esta historia, para la que las directoras viajaron durante seis años varias veces a Nicaragua. «Queríamos enfocar la película en un planteamiento de derechos humanos, por lo que estrenarla en este festival nos ha venido genial. Queremos salir de la polémica del aborto sí o aborto no y poner el foco en el punto legal. Pensamos enseñar qué pasa cuando se corta la posibilidad de que la mujer pueda tener a un aborto terapéutico y cómo eso afecta a toda la sociedad», dijeron a la agencia Efe las cineastas.
En Nicaragua, Daniel Ortega se aseguró la victoria electoral en 2006 aliándose con la iglesia católica y ofreciendo como moneda de cambio la ilegalización del aborto incluso en los casos de riesgo para la madre o de violación. Después de aquello, las directoras comenzaron a hacer su película y conocieron a Carla Cerrato, una sandinista a favor del gobierno excepto en este tema, “ahora tiene que luchar por ver cómo reconcilia tener que cambiar su juramento hipocrático de salvar vidas con la nueva situación, en la que están muriendo las mujeres».